jueves, 11 de agosto de 2016

Fútbol y negocios sucios


por Carlos Aira *

La semana próxima el oficialismo llevará al Congreso el proyecto de transformación de clubes en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD).

Si esto es aprobado en ambas cámaras, privados podrán comprar no solo el activo de las instituciones sino también su historia, trabajo y sentimiento.

Esto sucede en un país que cambió un fuerte mercado interno por capitales especulativos. Que en poco tiempo está padeciendo la rotura de tejidos sociales a niveles propios de los peores momentos de su historia. Con una AFA en manos de los verdaderos mercaderes, el fútbol estaría entregado.

Enfriar la economía significa que los clubes no sigan creciendo. Como dijo la vicepresidenta: que se den cuenta que son pobres. Los clubes han crecido muchísimo en los últimos diez años. ¿Lo sabías? Si no lo sabías, ¿no te preguntás por qué nunca te lo mostraron en TyC, por ejemplo?

A trazo grueso. Cambiamos Julio Grondona por una Comisión Normalizadora que tiene el tinte de fuerza de ocupación. Armando Pérez es el titular de la misma, pero la clave está en Javier Medín. Abogado de Boca Juniors, llega al club de la Ribera por su trabajo en SOCMA. Por si no lo sabés, SOCMA es Sociedad Macri. Ergo, las empresas del holding de la familia del actual presidente de la República.

Para que se comprenda. como en todos los ámbitos -reitero, todos-, existe una dirigencia ineficaz o corrupta. Como en todos los ámbitos, también los hay honestos y brillantes. Curiosamente nunca se visibilizan estos últimos. Lo que se ha instalado es que la dirigencia política y deportiva es corrupta e inoperante. La empresarial no es sana, pero sí honesta en sus intereses.

Esta situación me hace acordar mucho a un reality de History Channel llamado "El Socio". En el mismo, un truhán con mucho dinero coopta negocios que van a quiebra. Les impone una salvación a base de la prepotencia del dinero y sus reglas. Curioso es cuando se googlea qué fue del futuro de las mismas: la mayoría terminaron liquidadas.

Porque las SAD tienen esa lógica. Un empresario que invierte para reactivar o liquidar. ¿Invertir para liquidar? Se llama negocio inmobiliario. Piensen en la enorme cantidad de metros cuadrados, en muchos casos de excelente zonificación urbana, que apetece el mercado.

Por otra parte, en un país donde la inversión se desarrolla a través del blanqueo de capitales, el fútbol privatizado aceptaría gustoso el ingreso irrestricto de capitales de dudoso origen...

El salame promedio que junta tapitas para el Garraham pide que el estado invierta en el hospital infantil de alta complejidad y no en el fútbol. Es el mismo que vota políticas que desfinancian ese hospital -en forma sistemática- desde 2008.



El fútbol no solo es un enorme negocio sino una forma de organización social. Este gobierno va por toda forma de organización. Por eso estigmatiza la política, la organización sindical y social.

Para aquellos que declaman la moral y la ética por delante, esos que se indignan fácil: Talleres de Córdoba pertenece formalmente al Grupo Pachuca. Si no me creen, busquen en la web oficial de la empresa mexicana. ¿Alguien sabe de donde proviene el capital de Pachuca?

Si no te indignás por eso ni por el cierre de los clubes de barrio, ni por los tarifazos, sos el imbecil que te gustaría ser "el socio", no te da el piné, y terminás juntando tapitas para el Garraham.

Los clubes son de los socios. No de los narcos mexicanos (o donde sean).





* Periodista, escritor e investigador. Autor de Héroes de Tiento.

1 comentario:

Nicolas dijo...

jeje muy bueno lo de las tapitas. el gobierno no pega una. donde mete mano hace desastres. o sea además de ser reaccionarios neoliberales , no tienen gestión. si no se despabilan la veo muy oscura.
saludos