todos estamos igual

domingo, 14 de marzo de 2010

Antojo del último domingo de verano



Sigo buscando un lugar donde encajar
donde pueda decir lo que pienso
me he esforzado en encontrar a la gente
a la que no tuviera que dejar
dicen que soy inteligente
pero no me hacen ningún bien
ojalá pudieran
la cosa vuelve a empezar de nuevo otra vez
creo que algo bueno tendré
pero hay algo que anda mal
a veces me siento muy triste
a veces me siento muy triste
supongo que no fui hecho para estos tiempos.



Todo el tiempo se me ocurren ideas
para cambiar la realidad
nadie quiere ayudarme a buscar los lugares
donde podría encontrar algo nuevo
adónde puedo ir
si los que son amigos en las buenas se borran
de qué se trata
la cosa vuelve a empezar de nuevo otra vez
creo que algo bueno tendré
pero hay algo que anda mal
a veces me siento muy triste
a veces me siento muy triste
supongo que no fui hecho para estos tiempos.


9 comentarios:

julieta eme dijo...

el último domingo de verano???? nooooo por qué????!!!!!! por qué!!!!!??????

julieta eme dijo...

la de Herzog me encantó. besos.

julieta eme dijo...

ah, y Nicolas Cage también me encantó. no es lindo ni es buen actor, pero goza de mi total simpatía y cariño. además de que es un tipo alto, tiene lindos ojitos y una linda boca. y en algunas pelis tiene unos músculos muy respetables (por no decir que tiene un físico bárbaro...)

Liliana dijo...

Es probable que mi decepción con Un Maldito Policía surja de la comparación con sus geniales documentales, y el haber vuelto a ver recientemente Fitzcarraldo y Aguirre...

En mi opinión, es una película que tiene algunas escenas donde se advierte la "marca Herzog"(la monstruosidad del enorme cocodrilo en el accidente, los ojos inolvidables de las iguanas, el alma del muerto que continúa bailando, y la alucinada escena final), pero no me alcanzaron, me dejaron sabor a poco.

De "tan" maldito (tan, pero tan maldito) cada vez que veía a N. Cage no podía menos que extrañar a Kinski...

Oscar Cuervo dijo...

Quizá la clave está en que Herzog acá está proponiendo un juego distinto al de otras películas suyas. Creo que de lo que se trata es de jugar este juego, no esperar lo que se supone que es la "marca Herzog" y a posteriori repensar en qué consiste esa presunta marca. Porque la "marca autoral" nunca existe antes de las películas, sino a partir de ellas. Creo que esto vale también para Fassbinder o Sokurov, quienes desafían al espectador a re-pensar la noción de "autores" que tenemos de ellos. No vamos al cine a reencontrarnos con lo que sabíamos de antes de un autor, porque el autor es hecho por sus películas y no al revés. Algo de esto digo de Sokurov en la nota del último nro. de La otra y creo que se aplica perfectamente a Herzog. Es admirable que a sus 65 siga buscando sus marcas y no simplemente volviendo a las que ya le conocemos. Pero eso lo vamos a ampliar en el programa de esta noche.
saludos

Martha dijo...

Hum!! Yo vi la versión anterior de UN MALDITO POLICIA y no me imagino cómo puede superarse. Esa escena que está sin una maldita alma, absolutamente sola y uno sólo escucha lo que está pasando, que es el policía drogándose...es difícil de superar.martha

Liliana dijo...

Posiblemente tengas razón, Oscar: a lo mejor la ví con el prejuicio de la "genialidad", y no supe jugar este juego. Pero es cierto que algo me pasó con esas escenas y no con el resto de la película, que no es mala, pero...

Y pensándolo bien, tal vez tenga que ver N. Cage, cuya maldad no me seduce para nada...je. Ni siquiera me dió para el humor, en fin.

Menos mal que Herzog se encontró con Kinski antes de filmar Aguirre, no me imagino a Cage siendo "la ira de Dios"...

saludos!

Lilián dijo...

A mi en cambio me gustó este Maldito policía en Nueva Orleans, su ironía, su forma de subvertir ese policial hollywoodense al que estamos acostumbrados y sobre todo, ese humor que sobrevuela toda la película y que sirve hasta para aprovechar los tics de Nicolás Gage (actor que no es de mis favoritos) en beneficio.
La escena de las iguanas es memorable, quedará en mis retinas por mucho tiempo.

julieta eme dijo...

creo que no hay que ver a Kinski y a Cage como figuras intercambiables. Kinski era un actor de películas de segunda que en manos de Herzog se volvía simplemente genial. en cuanto a Cage, merece ser visto sin compararlo con nadie. de otro modo, no se entra en el juego. y a mí me parece que en ese papel está fantástico. besos.