sábado, 29 de marzo de 2008

Soy peronista por tiempo indeterminado


Tatiana:

como antiperonista visceral te definiste muchas veces en conversaciones que hemos tenido y creo que así te comportás, como antiperonista visceral, en los debates que estamos teniendo acá en las últimas semanas.

Gorila es un término cuestionado últimamente. Suena despectivo. Pero tiene una ventaja: nomina a una posición que en la historia argentina reciente se define por la negativa: "yo políticamente no soy nada pero detesto al peronismo". Es gente que según las coyunturas electorales ha ido votando a Alfonsín, a algún partido socialista, a la Coalición Cívica de Carrió y Patricia Bulrich, ha votado en blanco, ha impugnado su voto o no ha ido a votar, cualquier cosa menos votar a un candidato peronista. No saben muy bien qué quieren pero saben qué no quieren: ser peronistas.¿Por qué? Vos has aportado muchas frases que pueden entenderse como por qué el peronismo es detestable; algunos ejemplos:

"El hecho de que el peronismo sea el único partido o movimiento o como se llame capaz de gobernar es lo mismo que decir que Stroessner (tan amigo de Perón) o que Fidel Castro o que Stalin fueron los únicos capaces de gobernar en sus respectivos países. En la Argentina de los últimos 50 años, los poderes que están detrás del poder sólo han dejado gobernar, en elecciones libres y períodos completos, a los peronistas."

"La única división grosera que trazaría es la siguiente: los que votan a los malos conocidos de siempre porque "son los únicos que pueden gobernar", y "roban pero hacen", y los que se animan a ir para adelante y votan algo distinto para tener una República de verdad y no un mamarracho de país"

"Los jefes del movimiento obrero, los gremialistas defensores de la clase obrera, se cagan (perdón por el exabrupto) en todos los obreros juntos y son zorros genuflexos ante los poderes de turno, sobre todo si son militares, sobre todo si son genocidas."

Considero que esta clase de exabruptos son muy groseros desde el punto de vista del análisis político, que entender los conflictos del país debería demandar una afinación (palabra kierkegaardiana) más delicada, empezar a buscar matices, contradicciones, paradojas, desconfiar de las apariencias.

Porque una descalificación tan brutal como que todos los sindicalistas son matones, genuflexos, corruptos, es una ofensa a muchos sindicalistas que no son ninguna de las tres cosas y que vos, enceguecida por tu antiperonismo visceral, los condenás a todos al infierno.

Que es una pereza intelectual, de parte de una persona instruída, inteligente y pensante como vos, atribuir la pobreza que hay en el país al peronismo. Porque la verdad es que nunca te escuché decir con la misma pasión las barbaridades que han hecho en el país los gobiernos antiperonistas.

Hace poco hablabas del derramamiento de sangre en la Argentina y lo atribuías al peronismo, tuve que preguntarte varias veces si no tenías en cuenta la sangre derramada por la revolución libertadora, los 18 años de proscripción al peronismo, la dictadura de Videla. Todavía no escuché que pusieras igual pasión para hablar de los muertos peronistas, fusilados, secuestrados desaparecidos, no aparece en tu vocabulario ninguna expresión para nombrar a los militantes peronistas que no son corruptos ni genuflexos. A lo sumo calificás con aire de perdonavidas a esos peronistas como "ingenuos", lo cual es una de las formas más disimuladas del desprecio: no te entra en la cabeza que alguien inteligente y honesto pueda ser peronista.

Fijate que tuve que preguntarte muchas veces en esta semana algo acerca del muerto de los piquetes chacareros, porque ante el terrible fantasma del matón Delía, no apareció ninguna mención a la persona que mataron los piquetes rurales. Te pido que hagas el siguiente ejercicio: decime qué hubiese pasado hoy si se "le hubiera muerto" una persona a un piquete dirigido por Delía.

¿Por qué no veo que te indigne ese muerto de esta semana y te indignás al hablar del gordo piquetero? Lo calificaste de matón peligroso e incluso hipotetizaste que si por él fuera se habría producido una matanza en los actos de esta semana. La cual no se produjo porque los "manifestantes" del cacerolazo se apartaron a tiempo. Te vuelvo a pedir una cosa: decime cuántas matanzas produjo antes Delía. De dónde sacás que esa matanza se habría producido si no es desde la condena sin juicio previo. Qué pruebas tenés para decir que Delía es más peligroso que los que en el corte de rutas producen un muerto, tiran la leche, desabastecen el país.

Yo pienso que tu obsesión con Delía corresponde a la agenda dictada esta semana por la radio y la televisión, vos que justamente sos tan crítica del poder, no analizás en este caso el poder mediático que construye un fantasma matón sin muertos y omite al muerto de los matones sin fantasma mediático.

Lo que más me molesta en tu posición es tu pereza intelectual. Creo que adherís instantáneamente a la imagen de matón de Delia porque es sintónica con tu anatema previo del peronismo matón. Y deslizás una débil expresión a regañadientes para referirte al único muerto que ha tenido la crisis del campo esta semana.

Comprendo que la palabra "gorila" es desagradable. Confieso mi conflicto al no encontrar una palabra mejor para denominar a la actitud prejuiciosa, perezosa y complaciente con las aberraciones que cometen los no-peronistas, que en general se salvan de tu ira.

Prometo que no te llamo gorila nunca más.

Yo hasta hace pocos días decía que no era peronista porque la categoría "peronismo" me parecía que se había vaciado de sentido, sobre todo después del menemismo. Me parecía que era una identidad politica caduca. Pero ahora, por mi punto de vista y en este contexto político, en el que ser peronista ha vuelto a ser un anatema en boca de la clase ilustrada, ahora que ser peronista es ser matón, Delía, mamarracho y corrupto, he decidido declararme peronista por tiempo indeterminado.

Así que a partir de ahora, todo lo que se diga de los peronistas se dice de mí.

saludos

OSCAR ALBERTO CUERVO

16 comentarios:

Anónimo dijo...

oscar, estoy azorada.
acabo de mandar a mis amigos peronistas -algunos conocidos, otros no- un mail diciendo: desde el jueves soy peronista.

sólo que tu post redondea mi sentimento de una forma perfecta: ex franjista, socialista nieta e hija de socialistas, he decidido yo tambien ser peronista por tiempo indeterminado, ya no sólo por el discurso de Critina, ya no por el cacerolazo del palurdaje, sino por la actitud vergonzosa de varios ¨pensadores argentinos¨que corroboran que la patria no les ha debido nada y nada les deberá.
Te hago un treueque, vos me pediste Piquete Chic, y yo te pido este texto perfecto, aceptás?
Un abrazo y qué bueno que tántos nos sintamos así en este momento del país.

Anónimo dijo...

oscar, estoy azorada.
acabo de mandar a mis amigos peronistas -algunos conocidos, otros no- un mail diciendo: desde el jueves soy peronista.

sólo que tu post redondea mi sentimento de una forma perfecta: ex franjista, socialista nieta e hija de socialistas, he decidido yo tambien ser peronista por tiempo indeterminado, ya no sólo por el discurso de Critina, ya no por el cacerolazo del palurdaje, sino por la actitud vergonzosa de varios ¨pensadores argentinos¨que corroboran que la patria no les ha debido nada y nada les deberá.
Te hago un treueque, vos me pediste Piquete Chic, y yo te pido este texto perfecto, aceptás?
Un abrazo y qué bueno que tántos nos sintamos así en este momento del país.

Anónimo dijo...

Aunque te cueste admitirlo, Oscar, creo que sos por lo menos tan visceral como yo. Las citas que ponés en tu post, aun sacadas de contexto, no puedo más que ratificarlas.
Cuando hablo de los sindicalistas, me refiero a ellos como corporación, no a las excepciones, no a los que dieron sus vidas para este legado que ahora tenemos. Tengo una hermana que fue peronista y estuvo en medio de las balas cuando en el ’73 fue a recibir a Perón en Ezeiza. Militó en un sindicato peronista cuyo dirigente era de los mejores y que, sin embargo, a la hora de arrodillarse, se arrodilló como todos, después de la hecatombe de la dictadura militar.
En lo que a mí respecta, cuando entraba la caballería en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, mis compañeros tenían que sacarme a la fuerza de las asambleas estudiantiles. No voy a contar detalles, pero yo misma no fui una desaparecida porque legiones de ángeles me protegieron. Otros no tuvieron la misma suerte y fueron masacrados a mansalva porque todos los traidores pudieron con mucho más de mil valientes. Por eso me enoja que me llames gorila.
No tengo un odio visceral e indiscriminado contra los peronistas. Uno de mis escritores preferidos es Leopoldo Marechal, de quien no sé si me queda por leer algún libro todavía. Tengo muchos amigos peronistas. La persona que más amo en la vida está afiliada al partido peronista. Vos, peronista por tiempo indeterminado, sos una de las personas que más aprecio y admiro. Es verdad que dije que tengo un odio visceral contra el peronismo. Son palabras que se dicen en el fragor de las batallas verbales. Pero no te equivoques, Oscar. En realidad es el que siento por todos los traidores, como tantas veces dejé escrito en los comments. No sé si está bien o está mal sentirlo (y no podés olvidarte que también lo dije), pero es el mismo que siento por los jerarcas de la Iglesia Católica, siendo como trato de ser, católica. El mismo que siento por los llamados revolucionarios que fueron indultados y ahora ocupan cargos y son capaces de sonreír sin culpa alguna, habiendo sacrificado tantas vidas inocentes al Moloch de no sé qué revolución. ¿Y otra vez te tengo que explicar porqué es mayor mi bronca contra ellos que contra la casta militar o la burguesía industrial o terrateniente? Porque ellos son lo que son, defienden sus prerrogativas, sus riquezas, su poder, y les importa un bledo obtenerlos a costa de los humillados y ofendidos. Lo digo muchas veces. Esos no son traidores, son enemigos. Y uno puede pelear contra ellos, eligiendo incluso perder la vida. Pero el traidor, no. El traidor se hace pasar por tu amigo y confiás en él y sos capaz de dar la vida por él. Y él lo sabe y de eso no le importa nada. Te entrega, y hasta es capaz de reírse de tu amor. Repito, no sé si está bien o está mal lo que siento, aunque en el fondo sospecho que está muy mal. Hay autores (por ejemplo, un cristiano admirador de Gandhi que se llamaba Lanza del Vasto) que tienen piedad de Judas y lo salvan. La verdad es que los admiro. A lo mejor algún día también a mí se me pueda conceder esa gracia. Ojalá. Hasta ahora no he podido abrir plenamente mi corazón a ella. Al menos en el plano del sentimiento y el pensamiento. El que dijo lo de la viga en el ojo, también dijo de Judas que más le valiera no haber nacido. Palabras muy duras. Pero aun en la traición, lo llamó amigo. La paradoja del amor, diría Kierkegaard. No te quepa duda que yo sería incapaz de desear en serio la muerte de cualquiera de todos esos traidores. Pero no puedo evitar sentir que más les valiera no haber nacido. Esta es la peor batalla que tengo que librar conmigo misma. Porque, como singulares, todos tenemos un poco o un mucho de Judas y siempre, de algún modo, traicionamos el amor que nos debemos los unos a los otros.
Pido disculpas a los lectores del blog por esto que parece una carta confidencial, en la que tengo la sensación de que los únicos interesados debemos parecer Oscar y yo.

Oscar Cuervo dijo...

Tatiana:
comprendo tu visceralidad y no te la reprocho. Para mí está bien ser así. El problema es que mis vìsceras se retuercen ante otros.

Vos hablás de los jerarcas indultados que hoy ocupan cargos y no me queda claro a quièn te referís, porque después de todo los jerarcas indultados no son tantos y no sé cuáles son los que ocupan cargos y qué cargos ocupan. Si me podés hacer esta precisión, te lo agradeceré, así te entiendo mejor.

Pero te aviso que yo no tengo ninguna particular estima por los jerarcas indultados. Tampoco siento una estima especial por los jerarcas no indultados (supongo que los habrà, o no?). Te digo más: una vez polemicé con integrantes de HIJOS que decían "Los desaparecidos son lo mejor que teníamos". Y dije: no creo en esa frase: entre los desaparecidos debe haber habido de todo, no puedo decir que fueran mejores o peores que los que sobrevivimos. El ser desaparecidos no los mejora. El asunto era que, fueran mejores o peores, la desaparición es un crimen.

A los Montoneros (creo que ellos son los que recibieron los indultos de Menem, no?) no les tengo especial aprecio ni se los tuve antes. Creo que su posición formó parte de un trágico error, en los mejores casos, y de al menos una soberbia criminal en los peores.

Así que no me interesa plantear el tema del peronismo en términos de una dialéctica "amigos/traidores". Los jerarcas no me traicionaron porque nunca tuve expectativas en ellos; otros montoneros no me traicionaron porque hicieron su camino y fue un aprendizaje vital para ellos, como el que hacemos todos; y hoy alguno de ellos es mi amigo.

Yo creo que tu error no es tu visceralidad, ni tu condena a los jerarcas traidores, sino un error de apreciación politica y de posicionamiento actual. Yo nunca pondría al peronismo como un bloque homogéneo. Nunca lo fue. En tu caso te lleva a cometer una gran injusticia y un grave error polìtico al condenar en bloque al sindicalismo peronista. Hubo y hay muchos matices y grandes diferencias entre ellos. Me da la impresión de que vos repudiás al vandorismo y podría compartir ese repudio. Pero identificar sindicalismo peronista con vandorismo es un gran error histórico, porque ignorás o a condenás ligeramente a muchos, que no fueron para nada excepciones. No sólo Marechal, hay muchos otros intelectuales que asumieron una posición peronista y que no tienen nada que ver con ese dibujo esquemático que vos hac´´es del sindicalista traidor. El mismo D'elía es otra cosa. No reivindico ninguna de sus acciones de esta semana, pero él es un emergente de una situación histórica (los 90, el movimiento piquetero) que no tiene nada que ver con el vandorismo.

Insisto: lo que más te critico es que no seas un poco más rigurosa para advertir la problematicidad del peronismo, sus contradicciones y la necesidad de afinar la puntería para pensar en este fenómeno.

Yo veo muchas de las cosas que vos le objetás, pero para vos no es un problema porque ya lo demonizaste. Por momento les endilgás directamente todos los males del país. Eso te lleva a silenciar, omitir u olvidar el papel siniestro, asesino, liquidador, represor, destructor de puestos de trabajo y de progresos sociales concretos que representò el peronismo. Le endilgás las matanzas, le endilgás la pobreza.

El peronismo no fue proscripto durante 18 años, no lo voltearon ni los persiguieron por los rasgos autoritarios, ni por todos los defectos que vos les señalás. Fueron proscriptos porque fueron (y por lo visto siguen siendo) un hecho maldito para la oligarquìa que nunca ha querido siquiera sentarse a negociar por un país inclusivo (no digo justo, ni libre, ni soberano: digo apenas inclusivo; la quieren toda para ellos y en este apriete salvaje de las útlimas semanas vuelve a quedar en claro).

Así que te propongo una instancia de negociación entre nosotros: segí siendo implacable con los peronistas, pero espero que seas igualmente implacable con aquellos de los que no decís nada: con los piqueteros paquetes que están tirando la leche en vez de repartirla gratis, con los que juegan al desabastecimiento de la población, con los que están saliendo a luchar por quedarse con toda la guita y nada más, con la pequeñoburguesía que sólo se movilizó por sus ahorros bancarios y cumplen con una mediocre conciencia cívica saliendo a cacerolear cada muerte de obispo, con los que quieren que se terminen los juicios a los genocidas, con los que dejaron morir a un tipo al cortarles la ruta.

Te pido al menos la misma severidad para con ellos, esa que no se logra si sos tan complaciente con tu antiperonismo visceral.
besos!

Oscar Cuervo dijo...

Mariana:
ni que pedírmelo tenés: podés decir cualquiera de mis palabras sin siquiera citarme, hacelas tuyas si te sirven. Todo sea por joder a los gorilas, jeje.
saludos

Anónimo dijo...

Tatiana, con todo respeto, traidores hay en todas partes. Solo resumirlo al peronismo es una generalización, toda generalización es basicamente mala y la madre de la discriminación. Ej: " Todos los homosexuales son promiscuos". No habría ninguna diferencia en decir: " Todos los peronistas son traidores".
Por lo que contás parece que nos movimos por las mismas épocas, vos en la Facultad de Filosofía y Letras y yo en la de Medicina. Pero yo tengo una visión diferente. En mi caso después del horario de Facultad, yo iba por motus propio a trabajar a los dispensarios del padre Múgica en la Villa 31, asesorar con vacunas, despiojar, control de natalidad, etc. Yo ví el laburo que se hacía en el llano y esto lo hacía el peronismo, a mi nadie tiene que contarme la "historia" la viví. Se ría largo de explicar, el laburo que hacíamos, poco importaba la identificación política, era cuestión de solidaridad. Por cierto, yo era una niña de clase media alta que vivía en Olivos, en una casa de 400 mts. cuadrados y pileta de natación...Mis viejos eran antiperonistas acérrimos y nunca supieron porque llegaba tarde a casa...no hubieran entendido que solo de solidaridad se trataba, su gorilismo no les permitía ver más allá de sus narices. También soy sobreviviente, sin siquiera saber por qué. En 2 ocasiones el "falcón verde" me vino a buscar, solo que se equivocó de dirección, se ve que fue por apellido y anclaron en la casa de mi tío y se ocupó de darles un "dato erróneo". Cuál fue mi pecado?. Ayudar?. Vino el proceso, la mayor cantidad de desaparecidos son peronistas, eso es un dato de la realidad. El mayor traidor?. El radicalismo y el Partido Comunista. Incluso en el caso del partido comunista a nível internacional. Curiosidad: Rusia fue de los pocos países que acepto al proceso militar como legítimo y siguió manteniendo relaciones comerciales. Y habría mucho más para decir, pero este medio es limitado. Hubo algún traidor dentro del peronismo?. Sí. Todos?. No. Pensalo.
Yo nunca me definí como peronista, a pesar de todo lo vivido. Será porque no me gusta encasillarme, pero mirando a lo largo de toda mi vida, recién hace poco nomás...me dí cuenta que lo más parecido al proyecto de país que pensé y pienso, lo encarna el peronismo, hoy y acá. Por consiguiente me defino como tal. Yo puedo sacarme el casette cultural que me enchufaron, rebobinarlo y volverlo a grabar.

Anónimo dijo...

Fe de erratas: sería

Arqueck dijo...

No puedo creer que la persona inteligente y eficaz que se refirió a Quintín en un brillante post anterior sea la misma que escribió este sinsentido.

"Te vuelvo a pedir una cosa: decime cuántas matanzas produjo antes Delía"... ¿qué tiene que ver eso con que vaya a una manifestación pacífica (a la cual estoy en contra) a golpear gente, para dispersar la marcha? ¿Qué tiene que ver eso con que no deje a ciudadanos expresarse en paz?

"Qué pruebas tenés para decir que Delía es más peligroso que los que en el corte de rutas producen un muerto, tiran la leche, desabastecen el país." Son dos mierdas, dos. Si para juzgar ese accionar parapolicial hay que, antes, hacer juicios totales, hay un grave problema... ¿Qué tan idiota hay que ser para defender a D´Elía?

Repito: ¿qué tan idiota hay que ser para defender a D´Elía?

Y que algo se defina por lo negativo, por lo que no quiere, politicamente, es algo aceptable. No es bueno intrínsecamente, no es, por lejos, lo mejor, pero puede suponer una determinación y un rumbo.

El peronismo terminó en el `55. Menem, Isabelita, Martinez de Hoz, Tula, Duhalde, Kirchner, D´Elía... si te parece que seguir a esa gente por un simbolito es ser peronista, te felicito.
Sos una persona normal.

Anónimo dijo...

Oscar:

Así planteadas, como en este último comment, acepto tus críticas y me reconozco en ellas.
Sólo quiero aclarar que lo de repartir la leche y los productos que se tiran lo dije muchas veces a las personas con las que me encuentro, aunque no lo haya dicho en este blog. Vos dirás ¡flor de omisión! Pero atrás no se puede volver, sino sólo lamentarlo. Comparto también tu sentir por el hombre que murió en la ambulancia porque no lo dejaban pasar. A esta insensibilidad nos vamos dejando arrastrar por intereses mezquinos. Creo que nunca me pronuncié sobre el conflicto en sí mismo porque dije que desconozco la trama secreta de esta nueva prueba en que nos encontramos envueltos.
Respecto de los sindicalistas, si se llama vandorismo a todo lo que siguió después en la gran mayoría de los gremios, es posible que sea como vos decís y que cometo la injusticia de meter a todos en la misma bolsa.
Algunos jerarcas indultados estuvieron en el gobierno de Menem, y creo que en el de Duhalde y Alfonsín también, ocupando puestos importantes en distintas áreas de la economía y el comercio internacional. Por supuesto, me refería tanto a montoneros como a militares. Fue en la época en que mataron al periodista José Luis Cabezas, ¿te acordás?, cuando aparecían nombres impensables, que ya no recuerdo, porque sabés que la economía no es para nada mi fuerte. Es más, agradecería a vos o a cualquiera de los lectores de este blog que saben más, que me los recordaran. Ellos estaban, y no sé si lo siguen estando, en puestos claves, libres de culpa y cargo, como estuvo Harguindeguy cumpliendo prisión domiciliaria en las playas de Pinamar.
Es verdad que la clase media sólo se movió por el corralito y a mí también me preocupó desde siempre esta indiferencia proverbial de una clase de pequeños burgueses que no son tan pequeños pequeños porque de ella salen y salieron grandes científicos, grandes pensadores, grandes artistas. Y sin embargo, también sé que de ella salen y salieron los que vos llamás los cualunquistas, los no te metás, los yo argentino, los que pudiendo tener una gran responsabilidad ni siquiera la delegan, directamente la relegan y la desdeñan, y su conciencia cívica, aunque ellos no sean tan pequeños pequeños, sí que es mediocre mediocre.
Mi obsesión con D'Elía, se debe a que me parece injusto que haya llamado ratas a gente que no había ido a una confrontación y que haya considerado que eran superiores a ellos los barrabravas de Almirante Brown. También López Rega era un ser insignificante que quizá no había matado a nadie, pero seguramente a casi todos los que escribimos ahora en este blog nos habría incluido en las listas negras de la Triple A.
De las manipulaciones mediáticas ni qué hablar. ¿Qué se puede esperar de un emporio cuyos empleados en los noticieros se rasgan las vestiduras por la corrupción, la violencia, el crimen, a los que tratan de desenmascarar con cámaras ocultas, y a la media hora siguiente hacen un show de la violencia, la corrupción y el crimen con policías en acción, mujeres asesinas y películas que te dan escalofrío con que sólo veas los avances? En esta esquizofrenia social generalizada, es muy difícil poder hacer pie.
Pero de algo estoy muy segura: que la ley debe ser cumplida. Que no apoyaría jamás un golpe de Estado, aunque fuera Menem el jefe de Estado, y que hay que decir NO a cualquier intento que quiera enfrentar una vez más con la violencia a argentinos contra argentinos. De lo contrario, no habremos aprendido nada de tanta vida inútilmente segada porque nosotros estábamos y seguimos estando cegados.
Shalom desde el alma, no como los que predican la paz con los labios y en sus corazones maquinan la guerra.

Oscar Cuervo dijo...

arqueck:

de alguna manera tu incredulidad ante mi post está prevista en mi idea inicial: puesto que parece incaeptable para gente como vos -seas quien fueres- que alguien "inteligente y eficaz" se declare peronista, por eso mismo es que me vuelvo peronista por tiempo indeterminado.

Sin embargo, fijate que la gente normal que manda sus llamados a la radio y repite lo que dicen comentaristas como Grondona y Lilita dice cosas muy parecidas a vos, expresa una indignación idéntica a la tuya.

Esa gente normal tiene una escuálida imagen de las cosas y no se pone a pensar más allá de las imágenes bidimensionales que la tv entrega. No manejan conceptos sino íconos. Por eso razonan así: peronismo = Isabelita, Tula, Delía. Es un universo maravillosamente acotado y no brinda dificultades de comprensión. Es cómodo también, ya que no exige la ampliación de puntos de vista, testimonios, autores, contradicciones, matices. Basta con consumir imágenes. Bienvenido a la telecracia.

Quizá esa comodidad sea la que te lleva a distorsionar lo que yo digo claramente. No hay defensa alguna de Delía en todo lo que yo escribí en este blog, sino una crítica a las falsedades que se dicen por tv y que vos repetís: parapolicial, etc. No hay el menor rigor al hacer esa caracterización, ni se apoya en evidencia alguna. Debes ser muy joven y no conociste a la Argentina parapolicial. Delía, en un acto torpe e inoportuno, salió a la calle con su agrupación a expresar su apoyo al gobierno. Como saldo de su incursión le pegó una piña a un tipo. Esa piña ha hecho correr ríos de tinta y se transformó en el centro del debate político argentino, por todos aquellos que tienen pereza para pensar más allá de que miran la política por TV.

Resultado: soy una mierda, soy peronista.

suerte!

Anónimo dijo...

Arqueck: creo lo que Oscar intenta expresar es, salvando las historias políticas de cada uno de nosotros, cómo nos plantamos AQUI Y AHORA la gente de nuestra edad- cuarentones y cercanías-.
Tiene sentido revisar la historia del peronismo, ver cuándo empezó y cuándo terminó?
Yo vengo de una familia fuertemente antiperonista y así me siento....hasta que que de pronto un gobierno, cualquier sea su signo toma una medida que aplaudo. Pues tengo la dignidad de bancarlo. y el martes ire a la plaza. Jamás lo hubiese pensado. Odio a los K, pero en esto los banco a full.
Si mi viejo viviese, tambien lo haría, gorila y socialista como era.

La discusión sobre los 50s, 60s y 70s, que es la que propone (?) Q, es anexa, estupida, reaccionaria y da para largo.

Debemos aunar nuestras fuerzas peronistas, socialistas y quienes seamos, para defender aquello que deseamos: la escuela, la universidad, el hospital publico y luchar contra los milicos, el clero y la patria ganadera, financiera y canalla que hizo que los sueños de nuestros abuelos y padres hayan quedado pasteurizados.

Si nuestro discurso, el de la Lilita que lloraba cuando etchecolatz humilló al maestro Bravo en el programa de Grondona (qué verguenza... la voté, gorda soreta) el del propio Grondona, el de Lita de Lazzari y el de la derecha se parece, por asomo, al de la fina intelectualidad argentina, sonamos.
Los intelectuales siempre fueron cagones, siempre serán. Y los que no, están muertitos, como Haroldo conti y Walsh.
Y despues hablan de Sarmiento y de Borges, ja!
La incorrección política se ha hecho tendencia posmo y por eso cualquier forro que vive de rentas y de subsidios aunque sepa de literatura y sociologia se homologa a los dueños de las vaquitas, Arqueck.
No conocen las reglas del mundo del trabajo. Conocerlas y trabajar es una bendición. Nos hace libres para pensar y comprender.
Y respecto de D elía, que querés que te diga...
Será impresentable, usará camisa negra como Mussolini (qué boludos son los intelectuales, por Dios), pero tiene las bolas de decirle al país un par de verdades. Incluído el trangresor Fernando Peña, flaco. Esta sociedad odia a los negros y los dulces ¨pequeños productores¨lo han expresado frente a los micrófonos.
En un mundo de cobardes, alguien con bolas es digno de - mínimamente- de un aplauso, aunque sea por un dia.

Saludos.

H dijo...

Cuervo

¿ No te parece una situacion igual de perversa seguir pensando la politica como una definicion binaria como si lo que se dispurtar en el aqui y ahora fuera un partido de futbol?

Las aberraciones cometidas por el peronismo radican y encuentras un sentido de rechazo visceral desde la pacto con franco y la muerte, tortura y desaparicion de militantes anarquistas y socialistas.

En pos de defender ahora las posiciones contra la oligarquia no hay porque sentirse obligado a defender lo que tiene cimientos de una maquina de matar, no por eso uno queda junto a carrio o como defensor de videla.

Llamarse peronista, al menos en una persona que no transito epocas en donde la militancia relacionada al movimiento podia derivas en encuentros como con Walsh, en el hoy por hoy; es impensable.

El horror del peronismo cuervo esta en todos lados, cualquier persona que intente salirse de eso y no por eso salude a videla o a carrio y viva en el gran bs as, se las ves jodidas.

La politica para mi pensada hoy no es peron evita. Es y era, con encuentros, acercamientos e ilusiones Kosteki - Santillan, por mostrarte una posicion por fuera del peronismo, no relacionada al gorilismo y plantenandose, con curiosidad y animos, otra posicion, otras realidades. Y si eso no tenia ese camino y esa fuerza, teniamos un 26 de junio? Yo creo que no, por eso creo que es respetable aun en el dia de hoy y con la calle como esta no dejarse absorver por la polarizacion, seguir defendiendo otras eticas y otros ideales.

Para mi ser peronista equivale a asumir que soy un injerto politico y que soy manejada a gusto de necesidades urgentes. Creo que es valido negarse a hacerlo, como es valido sorprenderse antes tu posicion.

Por eso comparto las posiciones del mocase o del frente dario santillan, sin duda destelos de lucidez entre tanto ruido blanco.

slds

Oscar Cuervo dijo...

helena:

para empezar, mi opción "peronista por tiempo indeterminado" no está planteada como un llamado ético a otros, obviamente esto es un posicionamiento personal y para que los otros hagan con eso lo que quieran o puedan: por ejemplo, indignarse si les parece.

Yo soy peronista por tiempo indeterminado hoy y en relación a lo que ahora sucede, no en referencia al 45 o a la época de Walsh. Soy peronista ante los dilemas de este momento y por tiempo indeterminado: no juro amor eterno, para mí la política no es un matrimonio y las indentidades se determinan en los conflictos y caducan con ellos.

Por otro lado, no comparto por supuestto tus apreciaciones sobre la máquina de matar, porque si eso fuera un impedimento para asumir una posición política, yo no podría asumir ninguna: porque el marxismo, el anarquismo y el capitalismo, el cristianismo, el islam y el judaísmo, TODAS son máquinas de matar. Todas las políticas tienen las manos manchadas de sangre, así que no es cuestión de empardar muerto contra muerto.

Yo soy peronista por tiempo indeterminado, ante vos y ante arqueck, ante Tatiana y los demás. Para mí la política no es ética, no es opción por el bien, ni es religión, porque no creo en Evita, ni en Kostecki, ni en Santillán.

Es posicionamiento. Miestras esta posición me permite luchar contra lo que creo que hay que luchar, mientras me permite recortarme de la masa de las circunstancias y expresar mi diferencia, aquí es dónde me encontrás: peronista por tiempo indeterminado y hasta nuevo aviso.

No te convoco a sumarte. Vos decí dónde vos querés estar o dónde estás y perfecccto...

Anónimo dijo...

los peronistas por tiempo indeterminado y viscerales me indignan asi como los gorilas por tiempo indeterminado y viscerales.

Igual, antes que ser peronista soy gorila.
Por historia familiar y por convicciòn.

Un poco me indigno a mi mismo sin duda.

Creo que el peronismo fue algo que pasò en un momento determinado de la historia argentina, fue necesario en ese momento, fue muy positivo en algunos aspectos y muy negativo en otros. Hay que ver cuánto le perdonamos las cosas negativas. Yo mucho no lo perdono. Las atrocidades de Perón pesan más en mi balanza que las cosas buenas.

Después del 55 (o del 73, como quieran) el peronismo fue una estrategia para conseguir votos, nada más. No creo que el peronismo como tal exista hoy, y creo que durante esos años (del 45 al 73) fue algo confuso en varios aspectos.
Pero desde ya estoy en desacuerdo con el tipo de Estado y de Pueblo que planteaba Perón.

Más que una necesidad histórica, puedo decir que fue una inevitabilidad histórica.

besos.

Oscar Cuervo dijo...

Operador:
bueno, dale, indignate: pero yo no soy peronista visceral, sino peronista racional por tiempo indeterminado. Vos te movès en la zona de las secreciones corporales (la indignaciòn no es otra cosa).

Anónimo dijo...

dios los cria... y los soretes se juntan

aclaración: lo digo especialmente por el primer comentario